Su alto contenido de calcio, hacen del queso un alimento fundamental en la dieta de los niños. Al fin y al cabo, el calcio es esencial para que los peques crezcan sanos y fuertes. ¡No os perdáis estas recetas fáciles con quesitos!

En general, disfruto mucho cocinando pero alguna que otra noche, agradezco al cielo si tengo la oportunidad de hacer una receta fácil y nutritiva en sólo un par de minutos. ¡Por eso me gustaron tanto estas galletas con quesitos!

¿Lo mejor? Podéis prepararlas para sorprender a los peques en Navidad o en alguna fiesta infantil. Seguramente, triunfaréis entre los peques… y entre los adultos también, ¿por qué no?

Para hacer estas recetas, tan sólo necesitáis una cuña de queso, pequeños elementos para decorar y mucha imaginación. El bonito ratoncito de la foto principal se prepara con una cuña de queso, una galleta salada, dos rebanadas de salchicha para las orejas, un trozo de aceituna negra para la nariz, dos semillitas de sésamo para los ojos y una cola de cebolleta. ¿Os gusta?

Los monstruos de la foto de arriba por ejemplo, se preparan con un trozo de aceituna negra para la boca, una cebolleta para el pelo y dos trocitos de queso feta para los ojos (con pupilas de aceituna, claro). Todo montado sobre una galleta salada.

Este modelo es aún más fácil: una galleta salada, una cuña de queso y recortes de aceituna negra. Qué fácil, ¿no?

Y este simpático reno puede ser un entrante de Navidad perfecto. Coged una cuña de queso, dos pretzels para las orejas, un trozo de pimiento rojo para la nariz y dos trocitos de aceitunas para los ojos.

¿Qué os parecen estás recetas divertidas?